Concept store, comercio Online y piratas sobre dos ruedas

En esta ocasión voy a plantear la gran duda que tiene tarde o temprano todo aficionado al ciclismo que se precie: La compra de una nueva  y flamante bici. Llega un momento en que la bici, esa máquina indestructible de acero forjado en los 90, marca ni se sabe  y cambio Shimano Sis (impreciso a mas no poder pero efectivo) que, durante tanto tiempo te acompañó fielmente cada verano, se esta quedando algo obsoleta, por no decir que hasta los chavales de tu barrio la miran como si fuera una pieza de museo.

En los 90 las primeras bicis de aluminio eran lo último, si tenias una, te estabas convirtiendo en todo un pro, en mi caso una Top Line (he visto tanques acorazados soportar menos tralla), si encima la acompañabas de una estupenda amortiguación delantera (aunque no amortiguara nada y pesara casi como tu), ya eras la envidia del barrio o de tu grupo de amigos.

Pero llego el 2000, los nuevos materiales como el carbono, el comienzo de una nueva industria alrededor  del  ciclismo y claro esta, la competición de las múltiples marcas por hacerse un hueco en el mercado y un buen trozo del pastel.

Y aquí entramos nosotros, los humildes consumidores, con algo de dinero fresco en los bolsillos, conseguido de actividades legales, sin sobres ni tarjetas black, indefensos ante tantas marcas, precios, materiales, nuevos diseños, mejoras aerodinámicas, peso etc etc..... y sobre todo de  mucho marketing.

Las viejas bicis, esas grandes olvidadas.

Eso de renovar la bici cada 10 años cuando de tanto uso, empezaban a sonar  como  un gato desafinado ya no vale, ahora hay que estar a la última, el plan renove cada vez se realiza antes, y eso, claro esta, es lo que buscan las marcas. Su estrategia, sacan "avances tecnológicos" que obviamente (según estas) revolucionan el ciclismo y que, al adquirirlos, mejoran en un 50%.100% ó incluso 500% nuestro rendimiento como cicloturista, vamos,  nivel UCI pro tour, y es que seamos serios, ni tener un cambio electrónico (que vale casi o más que una bici) los tan polémicos frenos de disco (en bicis de carretera), o incluso lo último en fibra de carbono "mezclada con un polímero especial realizado en la NASA", te va a hacer una as de este deporte. Eso si, iras "ideal de la muerte" a todas las cicloturistas, como  recién sacado de un catalogo de moda. Aunque todos sabemos lo que realmente importa: una buena base y horas de entrenamiento, con algo de sacrificio, y después,  si nos queda algo de aliento, quizás podamos pensar que gastando los cuartos en una buena maquina sería la guinda a tan buen pastel, pero primero, la casa hay que empezarla por los cimientos.

Por otro lado están las marcas, distribuidores y comerciantes. Que puedo decir, el otro día estuve en una Concept Store, la  de la marca de las dos letras, española al 100% (pero con todas sus factorías en Portugal y China), y la verdad me quede sorprendido. Pregunte por un modelo que fue presentado en Agosto del 2015 (buque insignia de la marca) y: ¡no sabían ni que existía! tuvo que ir el comercial a la pagina web y ver que ya la vendían desde hacía meses. Esto dice mucho de este tipo de tiendas: mucha fachada, mucho logo, mucho uniforme,ni una mancha de grasa en el suelo, pero eso si,  le importan un carajo tus necesidades o inquietudes  como ciclista, solo vender (aunque con desconocimiento absoluto del producto), y lo principal: desde el último tornillo de tu bici hasta los calcetines que lleves  tienen que ser de su marca, fidelidad absoluta a la marca, adoración a la marca por encima de todo (hay ejemplos claros en otros sectores) como una buena secta que se precie, de ahí las concept store. 

Nunca  he entendido a los fervientes consumidores de ciertos logos o marcas para identificarse  socialmente. Cosas buenas tendrán, pero también malas...

Debido a lo mencionado anteriormente, no me extraña que mucha gente (cada vez más), antes de acercarse a este tipo de tiendas prefiera un  una bici  Online, sin intermediarios y distribuidores, pero con garantías y obviamente una buena relación calidad-precio, de lo cual carecen las tiendas super mega maravillosas en las que lo que importa es vender a toda costa. Por cierto, estas marcas premium,que principalmente lo que pagas es por llevar el logo en el  cuadro (la mayoría  "made in lejano oriente" ) ya que vienen con un montaje y ruedas para tirar a la basura en cuanto llegas a casa y encima te cobran como si se tratase de una bici UCI pro tour (al final has pagado un cuadro y no un Picaso precisamente), es mi humilde opinión.

Por eso quiero  romper una lanza por los comercios de toda la vida, esos que llevan 30 años o más en nuestra ciudad, entienden el ciclismo, tiene adn ciclista y llevan toda la vida dedicándose a esto,  no confundir con las tiendas que se han metido en el negocio de la bici con en el apogeo de la vida descontamianda y el auge del ciclismo urbano (ahora  en mi ciudad han empezado a surgir como setas), también huelga decir que la duración en muchos casos de estos oportunistas es directamente proporcional al servicio-calidad que ofrecen. En un comercio especializado y sobre todo con profesionales a la cabeza te podrán aconsejar, y si tienes un trato cercano con ellos te solucionan cualquier problema o duda antes de iniciar un  gran desembolso en nuestra futura bicicleta. Y recordad, lo que importa realmente son los motores de la bici (en nuestro caso las piernas se sobreentiende) el chasis solo es el complemento, así que a cuidarlos, que duren muchos kilómetros y no nos tendremos que preocupar nunca del tipo de bici que llevemos.